¿Qué es la violencia doméstica?

La violencia doméstica es la violencia ejercida en la familia o contra la pareja. El daño es físico y emocional. La violencia doméstica está prohibida en Suiza.

¿Qué es la violencia doméstica?

La violencia doméstica puede ser física, psicológica, sexual o económica. Se da en parejas o familias: entre cónyuges o personas que son o fueron pareja. No importa si conviven o no. La violencia entre padres e hijos u otros miembros de la familia, como hermanos, abuelos, tíos, también se considera violencia doméstica.


Hay muchos tipos de violencia doméstica. A menudo se producen varios tipos al mismo tiempo.


A modo de ejemplo: pegar, amenazar, insultar, intimidar, asfixiar, encerrar en casa, tirar de los pelos, controlar, prohibir las llamadas telefónicas, forzar las relaciones sexuales, obligar a casarse, privar de dinero, desatender.


La violencia doméstica a menudo es un ciclo de tres etapas. Se desarrolla como una espiral que gira cada vez más rápido. Empieza con tensiones en una relación. A continuación estalla la violencia. Después vienen la calma, la reconciliación y los remordimientos. Luego las tensiones vuelven a aumentar y la violencia estalla de nuevo. Salir de un ciclo de violencia es difícil y casi imposible sin apoyo. Es importante buscar ayuda.


Una forma particular de violencia doméstica es la violencia post-separación. Una separación conlleva un cambio drástico en la vida. Antes, durante y después de una separación, el riesgo de sufrir violencia doméstica aumenta considerablemente. Incluso en las relaciones que no sufren de graves conflictos de pareja y violencia doméstica, puede producirse violencia en situaciones de separación. Los conflictos asociados a la separación pueden agravarse y desembocar en violencia grave o mortal. En situaciones de separación es importante que los afectados busquen apoyo.

¿Quiénes son los afectados?

En Suiza muchas personas sufren violencia en la familia o por parte de la pareja.


La violencia doméstica se da en todas las clases sociales y grupos de edad y puede afectar a cualquier persona.


Sufrir violencia puede poner en peligro la salud y provocar enfermedades mentales y psicosomáticas.


La violencia doméstica es una carga para los niños y puede tener graves consecuencias para su desarrollo. Sufren no solo cuando experimentan la violencia directamente, sino también cuando son testigos de la violencia entre sus padres. Los niños afectados por violencia necesitan apoyo.

La violencia jamás es una solución.